Me duele el cuello ¿Qué hago?
¿Te duele el cuello? Espero que no, pero si estás aquí es porque quieres saber al respecto, ¡vamos a ello!
¿Qué es el dolor de cuello?
El dolor de cuello, o también llamado cervicalgia, se describe como “una experiencia sensorial y emocional desagradable asociada a un daño tisular real o potencial” en la columna cervical, la cual es un área que se distribuye desde la línea nucal superior y continúa hasta el nivel de la primera vértebra torácica y la cintura escapular (1).
El cuello es la región que se sitúa en el tercer puesto más común de quejas musculoesqueléticas, después de la columna lumbar y el hombro (2), aproximadamente el 50% de la población experimenta un dolor de cuello clínicamente importante a lo largo de su vida (3), además se asocia a varias comorbilidades entre las que se encuentran, dolor de cabeza, dolor de espalda, artralgias y depresión (4). Por todo ello, es el origen de muchas bajas laborales, generando grandes costes sanitarios.
Entre los factores de riesgo directamente relacionados con el dolor de cuello se incluyen traumatismos (ej.: lesiones cerebrales traumáticas y latigazos cervicales) derivados de la práctica deportiva de contacto (ej.: lucha, hockey sobre hielo, fútbol). Como cabía esperar, se han identificado estudios que confirman lo que observamos en la práctica clínica diaria, “se ha encontrado que ciertas ocupaciones, como trabajadores de oficina, trabajadores manuales y trabajadores de la salud, tienen una mayor incidencia de dolor de cuello” (5),También influyen ciertos factores psico-sociales asociados, como pueden ser la baja satisfacción laboral, el estrés, trastornos del sueño, tabaquismo, sedentarismo, obesidad, etc.
¿Cómo clasificamos el dolor de cuello?